El estilo mediterráneo y la arquitectura tradicional es un gran atractivo de este hotel y su extenso terreno transmite la sensación de libertad y serenidad. El edificio es nuevo (2007) y cuenta con las instalaciones, el mobiliario y los elementos más avanzados. Se trata de un hotel rústico con un total de 290 habitaciones, jardín y terraza. Es adecuado para familias, tiene aire acondicionado y dispone de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, caja fuerte, ascensor, cafetería y bar. También ofrece restaurante y aparcamiento para los que lleguen en coche y, además, se pueden alquilar bicicletas con las que podrá hacer excursiones por los alrededores. Este hotel goza de una ubicación segura y excepcional en el corazón de un parque privado. Encontrará restaurantes a 8 km, en Lunel; la playa de arena de La Grande Motte queda a 15 km y la estación de trenes más cercana está a 20 minutos de viaje, en Montpellier, donde hay también zonas de tiendas. El establecimiento se encuentra a 20 km de Nimes y a 20 km de Montpellier, en una zona tranquila cerca de las principales carreteras que llegan hasta las zonas turísticas más importantes, como el anfiteatro Arènes de Nîmes (a 15 km), la Abadía de Montmajour, el Canal del Mediodía/Estanque de Thau (ambos a 20 km), La Grotte des Demoiselles (a 30 km) y el casco antiguo de Arlés(a 45 km).